miércoles, 24 de junio de 2015

La Felicidad y el Bienestar ingredientes de la Salud integral de las personas y de las organizaciones: El proyecto UJI Saludable



A día de hoy, los expertos no se ponen de acuerdo sobre cuándo acabará la crisis, y las medidas más convenientes para salir de ella. Sin embargo, se observan cambios positivos en las políticas empresariales, en la dirección y gestión de los recursos humanos y de los equipos en algunas organizaciones; así como en los valores institucionales y personales, y en las nuevas competencias valoradas en los empleados. La sociedad está pidiendo un cambio ya, porque muchas situaciones del día a día parecen insostenibles. Pero como decía Albert Einstein “Si queremos resultados distintos, no podemos seguir haciendo lo mismo”. 

Desde las investigaciones que llevamos a cabo en el Equipo WoNT Prevención Psicosocial y Organizaciones Saludables (www.wont.uji.es) de la Universitat Jaume I, en el marco de la Psicología Organizacional Positiva (POP), pensamos que estos cambios ajustados a las necesidades reales deben ir encaminados a la búsqueda de la excelencia, la innovación y la calidad organizacional que marque diferencias entre organizaciones, y que permita la adaptación en el actual mercado laboral que es cada vez más complejo y dinámico. 

Pero si además de buscar resultados organizacionales excelentes, las organizaciones se esfuerzan por mantener la salud psicosocial de sus trabajadores y buscan incrementar el capital psicológico positivo de las personas que componen esas organizaciones estamos hablando de organizaciones positivas, esto es aquellas que son saludables y resilientes pero también más productivas. Se trataría de dar respuesta a preguntas poderosas como ¿Qué podemos hacer para contribuir al desarrollo positivo y la promoción de las organizaciones y las personas en situaciones de crisis económica, financiera y de confianza? 

Por ejemplo, fruto de este interés genuino por construir un mundo mejor se desarrolla el Proyecto Institucional UJI Saludable cuyo objetivo promocionar la salud y el bienestar de la comunidad universitaria, y de toda la sociedad en general, ya que la la UJI pertenece a la Red de Universidades Saludables (REUS) desde febrero de 2012, y desde 2014 a la Xarxa Valenciana d’Universitats Públiques Saludables. En la página Web de UJI Saludable podrá encontrar el lector mas información sobre este proyecto, sus objetivos, funciones, actividades, cuerpo técnico, etc. (ver http://ujiapps.uji.es/institucional/uji-saludable/).

La base del proyecto UJI Saludable es entender la salud desde una perspectiva mas integral y moderna. La definición de salud más convencional y más clásica la entiende como ausencia de enfermedad, quizá porque es más fácil comprender la enfermedad por las manifestaciones e implicaciones negativas de tipo personal y social que conlleva. Por el contrario, el estado de salud es menos perceptible y pasa inadvertido. Ya en 1948 la Organización Mundial de la Salud (OMS) emitió una definición amplia de salud que supuso, por primera vez, la aceptación de dos áreas relevantes del ser humano: la psicológica y la social, que se sumaban a la biológica para posibilitar un concepto integral de salud. La salud no es la mera ausencia de enfermedad, sino que ha de ser entendida de forma más positiva, como un proceso por el cual la persona desarrolla al máximo sus competencias y fortalezas. 

En este sentido, ese concepto de salud integral no incluye solo la salud física (que es fundamental) sino también la salud psicológica. En este punto, es interesante señalar que tradicionalmente, la Psicología se ha centrado casi exclusivamente en la patología, en los déficits de las personas y de las organizaciones, en lo que “funciona mal”. Esta focalización en los problemas, puede llevar a pensar que el ser humano está “exento” de rasgos positivos, como la felicidad, el optimismo, la esperanza, la creatividad, la responsabilidad, etc.  Hoy se sabe que para estudiar al ser humano atendiendo a toda su complejidad es necesaria una Psicología que no sólo resuelva problemas sino que también permita potenciar las fortalezas de las personas en todos los ámbitos de su vida, y de las organizaciones, siendo la universidad una organización mas en nuestras vidas. 

Éste es el enfoque de la Psicología Positiva que fue definida por Martin Seligman (profesor de psicología en la Universidad de Pensilvania y así llamado padre de la Psicología Positiva) como: “el estudio científico del funcionamiento humano óptimo” (Seligman, 1998). Pretende de alguna forma catalizar un cambio de enfoque de la psicología que incluya el reparar las cosas que van mal en la vida, pero también construir cualidades positivas en las personas y las organizaciones. Ese cambio de enfoque, de perspectiva, que propone la Psicología Positiva también se centra en el estudio del funcionamiento humano óptimo de las personas en el trabajo y en las organizaciones. En concreto en este último ámbito, las organizaciones e instituciones modernas están potenciando cada vez mas un enfoque más positivo, ya que saben que para poder sobrevivir (y especialmente en épocas de crisis y cambios turbulentos) es necesario un cambio de chip y una apertura hacia lo positivo. Sólo de esta manera, lograrán que los trabajadores sean positivos, esto es, sean proactivos, muestren iniciativa personal, colaboren con los demás, tomen responsabilidades en el propio desarrollo de carrera y se comprometan con la excelencia y la responsabilidad social. 

Para conseguir este objetivo es necesario que se ponga en marcha todo un mecanismo organizacional positivo. Y es aquí donde emerge la Psicología Organizacional Positiva (POP) que la hemos definido como el estudio científico del funcionamiento óptimo de la salud de las personas y de los grupos en las organizaciones, así como la gestión efectiva del bienestar psicosocial en el trabajo y del desarrollo de las organizaciones saludables. Su objetivo es describir, explicar y predecir el funcionamiento óptimo en estos contextos, así como amplificar y potenciar el bienestar psicosocial y la calidad de vida laboral y organizacional (Salanova, Martínez, y Llorens, 2005, 2014). Su razón de ser reside en descubrir las características que configuran una “vida organizacional plena”, dando respuesta a dos cuestiones clave: qué caracteriza a los trabajadores positivos (con altos niveles de felicidad y bienestar psicológico) y cómo son las organizaciones positivas, aquellas que son saludables y resilientes. 





Esa vida organizacional plena vendría determinada por características fundamentales que son: 

  1. Búsqueda de emociones positivas y desarrollo de aptitudes para multiplicarlas.
  2.  Emplear las propias fortalezas satisfactoriamente para obtener gratificaciones auténticas 
  3. Poner las fortalezas personales al servicio de algo que nos trascienda
Se trataría de descubrir estas características potenciadoras a diferentes niveles, no sólo a nivel individual, sino también a nivel interindividual, grupal, organizacional y social. Desde esta perspectiva es importante conocer por ejemplo, cuáles son los recursos de tarea (ej., autonomía), los recursos del ambiente social (ej., apoyo social entre los departamentos, servicios y grupos de investigación ) y las prácticas organizacionales organizacionales saludables (ej., prácticas de conciliación familia-trabajo) que favorecen la buena vida organizacional que también se da en las Universidades entendidas como organizaciones; qué papel juegan las creencias positivas en el desarrollo de las propias competencias, cómo se desarrolla el compromiso con el trabajo, la felicidad tanto hedónica como eudaimónica, y la resiliencia en el trabajo, cómo pueden las universidades contribuir al crecimiento y el bienestar psicológico de sus trabajadores, estudiantes y de la sociedad en general.

Teniendo en cuenta estos planteamientos se han desarrollado hasta el momento acciones positivas dentro del proyecto UJI saludable tales como: dos ediciones del curso de experto en psicología positiva aplicada (http://www.fue.uji.es/psicologia-positiva), diversas acciones formativas como manejo de los accidentes durante el entrenamiento en sala de fitnes, técnicas de gestión personal y profesional: mejora el bienestar en el trabajo, taller: psicología aplicada a los deportes de equipo, seminario de investigación sobre actividad física y salud en jóvenes, talleres de habilidades de Lider-como-Coach para Jefes de Servicios, colaboraciones con otras organizaciones como Medco Health, organización del día de la dieta mediterránea y de la semana de la salud con la Xarxa Valenciana de Univ Públicas Saludables, diseño de mensajes promotores de salud, talleres sobre crecimiento personal y mejora del rendimiento académico para estudiantes de la UJI, procesos de evaluación de riesgos psicosociales en PDI, PAS y Estudiantado, cursos de verano, etc.
 
Para finalizar me gustaría señalar que para comprender la salud ocupacional desde un planteamiento integral es necesario un modelo interdisciplinar de promoción de la salud y de las fortalezas de las personas en las organizaciones así como del funcionamiento integral de las mismas. Reclama un modelo multicausal que integre todos los elementos implicados en la salud de los trabajadores y considere, además, la importancia de la aplicación de medidas institucionales a este respecto. En este sentido, entiendo que los programas de promoción de la salud deben formar parte integrante de la política y la cultura de las universidades que valoran, propician y potencian la salud. En vez de concebir el lugar de trabajo como un espacio conveniente para que los profesionales de la salud lleven a cabo programas destinados a cambiar a los individuos, se considera que trabajadores y cargos directivos deben colaborar para convertirlo en un entorno saludable y que propicie la salud en toda la extensión de la palabra. Ésta es la base del enfoque de la promoción de la salud en el lugar de trabajo iniciado por la OMS que está orientado hacia el concepto de “organización saludable” y este el cimiento en donde se construye en positivo el proyecto de UJI Saludable.

Como siempre recuerda que no es magia, es investigación (:




miércoles, 11 de febrero de 2015

Psicología Positiva y Coaching: ¿Un Maridaje Saludable?




¿Conoces esa sensación que te abarca cuando notas que todo encaja? Sobrecogimiento dicen los expertos. Ese pensamiento de EUREKA! “Esto es lo que andaba buscando”. Así me ocurrió a mi cuando probé el maridaje entre la Psicología Positiva y el Coaching. Dos caminos que andaban a la suya, sin encontrarse. Martin Seligman, Profesor de psicología en la Universidad de Pensilvania, dijo que “El coaching es una “práctica” en busca de una columna vertebral científica (ej.  basada en la evidencia y con modelos teóricos explicativos). Creo que la disciplina de la psicología positiva ofrece al coaching esa columna vertebral”. No puedo estar mas de acuerdo con el así llamado Padre de la Psicología Positiva (PsiPos). 

La Psicología en su devenir histórico se ha focalizado en los problemas, en lo que funciona mal, en los trastornos, las patologías, etc. Todavía quedan resquicios de la imagen social del psicólogo como psicoanalista o curador de trastornos. Quien no piensa en su mas adentro que los que van al psicólogo es porque estan un poco locos? Que levante la mano! :) En su desarrollo durante el siglo XX la psicología se centró en paliar los trastornos mentales… A principios de siglo habian solo 12 categorias diagnósticas de trastornos psicológicos. Recientemente se ha publicado el DSM-V (Diagnostic and Statistical Manual of Mental Disorders en su quinta version) en donde hay casi 300 trastornos mentales clasificados. Con el avance de la sociedad, la modernidad, el desarrollo económico y social, aparecen mas trastornos. ¿Es curioso verdad? Pero también es cierto que tenemos mas conocimiento científico y avances en la investigación que nos llevan a mas precisión diagnóstica.

En este contexto, y para dar respuesta a esa falta de equilibrio en el conocimiento entre "lo que funciona mal/lo que funciona bien" en el ser humano, es en donde surgió la Psicología Positiva, cuya figura mas representativa es Martin Seligman que en 1998 en su discurso como presidente de la APA (American Psychological Association) se propuso desarrollar la psicología positiva desde la investigación científica alrededor del mundo para dar respuesta a muchos problemas personales y sociales desde una nueva mirada, que no se focalice en lo que va mal, sino en las fortalezas de las personas, los grupos, las organizaciones y los países y comunidades. El objetivo se está alcanzando: cada vez hay más revistas científicas (Journal of Happiness Studies, The Journal of Positive Psychology..), asociaciones científicas (IPPA, ENPP, SEPP) que organizan congresos nacionales e internacionales, (también la española SEPP-Sociedad Española de Psicología Positiva) de la que tengo el honor de ser presidenta… :), tesis doctorales y un largo etc. La Psicología Positiva es una aproximación de la psicología que enfatiza el optimismo y el funcionamiento humano positivo en lugar de centrarse en la psicopatología y disfunción. El objetivo no es remediar los déficits, sino impulsar las fortalezas. Pretende comprender y facilitar la felicidad y el bienestar psicológico desde la investigación científica. Me gusta mucho una metáfora que dice así. Durante la Segunda Guerra Mundial, los expertos en aeronáutica emplearon mucho tiempo y recursos en analizar los aviones militares que se estrellaban. Hasta que un día, alguien preguntó: “¿Por qué no analizamos los aviones que permanecen en el aire?”. Esta es una metáfora válida para el campo de la psicología positiva. “Se trata de centrarse en los aspectos positivos del comportamiento humano”. En otros posts de mi blog os contaré mas cosas sobre la Psicología Positiva, un campo que me apasiona y que cada vez me tiene mas “enamorada”. Ahora me voy a centrar en ese maridaje saludable.

Tenemos pues que la PsiPos es el esqueleto científico que andaba buscando el Coaching. Pero ¿Qué es el Coaching? Es curioso que la palabra “coach” viene de “coche” en ingles. Durante los siglos XV y XVI, empezó a hacerse muy popular la ciudad húngara de Kocs, situada a unos 70 kilómetros de Budapest, (entre Viena y Pest). En Kocs paraban los carruajes para descansar en el camino. Los herreros de Kocs construyeron un carruaje de cuatro ruedas con mejor suspensión que le pusieron el nombre de kocsi szekér. El coach es como aquel carruaje que acompaña a su cliente de manera ágil, segura y satisfactoria en su viaje a conseguir su meta. En la actualidad el coach tiene un rol múltiple: es un tutor, un monitor, un entrenador, que se fortalece en todas las actividades consistentes en preparar, motivar, entrenar, estimular al coachee o cliente.


Existen muchas escuelas y tipos de pensamiento sobre el coaching. Personalmente me gusta definir el coaching desde la Psicología como un “Proceso de aprendizaje orientado a la acción, la meta, y al cambio, mediante una relación colaborativa (one-to-one) no-directiva entre el coach y el cliente o coachee” (Spence y Grant, 2007). Me adhiero a un enfoque en la solución y los resultados… y no en los problemas. A un coaching basado en la evidencia, en donde el coach “acompaña” al cliente a conseguir sus metas, sus sueños…mediante mecanismos auto-regulatorios como: Identificar resultados deseados, establecer objetivos específicos, mejorar la motivación identificando fortalezas y construyendo creencias de eficacia personal y de equipo, identificar recursos y formular planes de acción, evaluar los logros, y modificar los planes de acción (si fuera necesario).

En concreto el Coaching Psicológico es una rama de la Psicología que se ocupa de la aplicación sistemática de la ciencia comportamental para la mejora de la experiencia vital, el rendimiento laboral y el bienestar de individuos, grupos y organizaciones.
Se centra en facilitar el logro de objetivos, en mejorar el crecimiento y desarrollo personal y profesional de los clientes en su vida personal y en el ámbito de trabajo.
No se dirige a tratar directamente casos clínicamente significativos de enfermedad mental o niveles anormales de malestar. No existe mucha investigación al respecto, pero para mi es un gran reto contribuir al desarrollo de esta profesión.

Y ahora viene el Maridaje que he llamado Psi Pos Coaching. Personalmente creo que el Coaching se puede entender como una intervención desde los principios de la psicología positiva desde diferentes ámbitos (personal, profesional, organizacional). La investigación no es muy abundante pero los estudios que existen al respecto apuntan a que la participación en procesos de Coaching en el lugar de trabajo, mejora constructos psicológicos positivos como son la auto-regulación mediante la consecución de objetivos, el insight y mayor autoconciencia, la resiliencia, la autoeficacia y el bienestar psicológico y subjetivo (una mayor revisión en Grant y Spence, 2013). Estando además el Coaching focalizado en los procesos de auto-regulación, y siendo un enfoque basado en las fortalezas y recursos, utiliza conceptos y metodologías propias de la Psicología Positiva. 

  
El Psi Pos Coaching es un proceso de intervención científicamente fundamentado que aplica herramientas basadas en la evidencia contrastable.  Es un tipo de Coaching que parte de la investigación científica en PsiPos y la traslada a instrumentos efectivos con el objetivo de ayudar a los clientes a incrementar su felicidad, bienestar y éxito Los PsiPos coaches utilizamos los principios de la PsiPos sobre el uso potencial de las fortalezas de los clientes (-optimismo, gratitud, creatividad…) para mejorar día a día su felicidad, y esta crece cuando experimentan emociones positivas, engagement, relaciones positivas, significado y consecución de objetivos.

Las características principales del PsiPos Coaching son:

       Tendencia a buscar soluciones, mas que analizar problemas
       Uso de un vocabulario codificado e investigado de fortalezas
       Uso de intervenciones e instrumentos de evaluación basado en la evidencia
       Atención a las emociones positivas y el afecto positivo (también las negativas)
       Uso de la indagación apreciativa



Y además, los resultados del PsiPos Coaching son espectaculares. Por ejemplo, los procesos del Coaching basado en la Psicología Positiva ayudan a conseguir los siguientes objetivos: alcanzar las metas personales y de la organización, conocer y activar las fortalezas personales, incrementar la felicidad y el bienestar psicológico, construir positividad alrededor de la persona, llegar al punto de inflexión positiva, desarroolar el optimismo y la esperanza, construir capital psicológico positivo, reflexionar sobre el sentido y significado de la vida y del trabajo, estimular el pensamiento creativo y lateral, florecer y prosperar como ser humano, como miembro de un grupo y en definitiva experimentar una transformación positiva radical.

Aquí es donde los caminos entre la Psicología Positiva y el Coaching se juntan, justo en los resultados de ese maridaje en donde todo encaja…  Y a mi me envuelve esa emoción de sobrecogimiento tan agradable, en donde empiezo a fluir, y donde mi pensamiento es “esto era lo que andaba buscando”… Soy tan afortunada por poder trabajar en este ámbito! Sé que puedo dar tanto y hacer tan felices a los demás! Es tan grata la emoción que me envuelve, que quería compartirlo con todos vosotros

Quiero acabar con una frase de Robert Biswas-Diener (el así llamado Indiana Jones de la Psicología Positiva) que dice que “El PsiPos Coaching es una de esas medicinas que son buenas también para el doctor”.

Seguiré con más post en mi blog sobre ese maridaje, por supuesto. Mañana mas y mejor!

Y recuerda, no es magia, es investigación.